Conservar la nutrición en lata más fresco que nunca

2016/10/27 20:55:12      Vista:

El valor nutritivo y saludable de los alimentos enlatados se ha subestimado en gran medida durante muchos años e incluso hoy en día el consumidor común cree que los elementos esenciales en los alimentos se pierden en el proceso de enlatar y nunca corresponden a los productos frescos disponibles en el mercado local. En realidad, los alimentos enlatados contienen un gran valor nutritivo.

La calidad de los productos para enlatar se controla estrictamente para mantener la frescura. En realidad son más frescos que la mayoría de los alimentos ¨frescos¨ que se guardan y se suministran usando canales habituales de distribución. La tardanza de cosecha, envío y procesamiento de los alimentos enlatados es bastante corta, en su mayoría menos de 2 horas, y esto consiste en una de las razones principales que explican por qué mantienen un valor nutritivo tan grande.

Las vitaminas son extremadamente sensibles a la oxidación, la luz y las altas temperaturas. Es un hecho bien conocido que los espárragos pueden perder hasta el 40% de su vitamina C en sólo 24 horas de almacenamiento, espinacas, el 30% y las judías verdes, el 20%. Estudios en la Universidad Cornell de Ithaca, Nueva York, han demostrado que con el calentamiento corto y de alta temperatura utilizado en el proceso de producir los productos modernos por los fabricadores de conservas, el valor nutritivo en realidad se ha mejorado. En el caso de los tomates y maíz en la mazorca, los licopenos, un material vegetal secundario, se liberan a alta temperatura y éstos desempeñan un papel importante en nuestro metabolismo, como un antioxidante contra los radicales libres de los cancerígenos. La pérdida de la vitamina C es considerablemente menos que en la cocina casera normal y un estudio independiente (véase la página 6 - ¨Lebensmitteldose Iniciativa¨ ILD) en la Facultad de Ecotrofología en Mönchengladbach (Alemania) demuestra que las vitaminas de grupo A, B y E, incluido el ácido fólico, se conservan junto con los carbohidratos, las proteínas y los ácidos grasos.

Utilizando diseños innovadores de acero de alimentos y conocimientos técnicos de fabricación, los alimentos enlatados han dejado su marca en un mundo cada vez más sensible a la seguridad, la salud y la nutrición. Las tecnologías sofisticadas de procesamiento de alimentos y la transferencia térmica eficaz durante el menor tiempo posible garantizan un control preciso de las temperaturas de destilación (es decir, esterilización) y mantienen altos estándares constantes de calidad para satisfacer las demandas críticas de los consumidores. Además, los alimentos enlatados están protegidos de la luz y la oxidación, y cuando se guardan a una temperatura ambiente de menos de 20 ° C, van a conservar sus vitaminas por lo menos 2 años sin consumir mucha refrigeración.